martes, 12 de noviembre de 2013

Entrada sin título

OTOÑO

Té. Castañas. Higos secos. Membrillos. Uvas pasas. Nueces. Manzanas. Y el orín de los dioses. Es otoño. Llega un momento, que dura sólo un instante, (para qué enredarse en trámites) que siempre es otoño. O como decía aquel poeta: Llega un momento en el que uno desearía escribir aún  mucho peor.

CONFIDENCIA

Escribí bien hasta que empecé a ser leído. Suponer una clientela me condujo a sus gustos. Pero por fin fui un miembro del pueblo. Saberme de ellos justificaba tanto mi ignorancia que me volví sabio por decantación. Y ya lo dice la Wiki: "...es necesario dejar reposar la mezcla para que el sólido se sedimente, es decir, descienda y sea posible su extracción por acción de la gravedad."

GRAVEDAD

No mucho menos grave, que siempre estuve, arrojaron de mí al fuego una masa disconforme que tan sólo pretendía arrebatarle la jodida existencia a una metamorfosis que lucía en exclusiva Gregorio Samsa.