martes, 14 de agosto de 2012

Necesito hablar con algún transeúnte

Necesito hablar con algún transeúnte,
platicar al oído de un sauce llorón,
necesito comentarle a alguna papelera
desde sus fondos de espanto
que yo también vivo de sobras orgánicas,
o hablar de metafísica abrazado a una farola
que luce sin luz.

Pero a ti te busqué toda la noche,
de avenidas desiertas y calles oscuras,
como un poeta de Hermes perdido en un verso.
Registré los jardines
la flora intestinal de la basura
y me quedé dormido junto a una madreselva.
Me despertó un transeúnte
que como yo viajaba en un barco a la deriva
en medio de la noche, colgado en la tormenta
mientras el asfalto ardía de lava y sal.

Meu amor, miña nena,
necesito hablar con algún transeúnte,
cenar contigo en el palacio de invierno,
pedirle un autógrafo a aquel bolchevique,
que enamorado, hizo una revolución
para conquistar el corazón de su amada.