domingo, 4 de septiembre de 2011

Postrado


Yo le di al mundo palabra de santo
e inicié versículos en estancias de altura
y en las celdas del alma
donde supe liturgias silencios y letras
puse devoción y precisa evidencia
e hice un mapa de mi azulada ternura
para no perder el ánima de la palabra.

Dura sólo un día el efecto
del bálsamo que merma
sahuméricos templos.
Recógete en rodillas.

Regreso

Austero bordón plano
regreso a trópicos callados
abandono esas áreas invadidas
repletas de rutas y defectos
quizás zonas de encuentros
citas y asambleas.
Moléculas y células en simbiosis planean
asaltar los labios
dónde algunos sonidos con alma de ruta
interpretan el blues
de torpes medusas gélidas o lánguidas.
Entonces tú y yo contaremos viejos
que nuestros huesos
(tu calcio mi óxido)
huelen siempre a limo
a boca de sangre
paladar de vainilla y acero.
Al amanecer malvas telas malvas
sobre los frágiles cuerpos
como una salva de cataratas
que trazan líneas blandas y rosas
entre nosotros las calles y los mapas
límites obstáculos
mil enebros dorados o ardiendo
borrados de los bosques por el fuego
para que el dolor de nuestro pecho
no se hiciera agua.
Austero bordón plano
regreso al liquen.

Buenos días primavera, geraneo optimista.


Un hombre solitario / un maestro Sony Boy. Hoy como un clavo. No se devuelve el viaje.