sábado, 11 de junio de 2011

EL MÁS TRISTE PÁJARO


Cometa

Los niños jugaban con la cometa,
balanceábase en el azul del cielo
cada vez más alta,
se agitaba, impulsada por el viento.
Desde arriba, a través del hilo,
bajaba la sangre del más triste pájaro.




2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ha dolido especialmente este bello poema.
Cuando las palomas se desangran...

Besos, Tomás.

Tomás Rivero dijo...

No te duelas, Alas. Sabes que en la poesía hay belleza, alegría, bueno y un poquito de dolor. Yo siempre procuro que esa parte dolorosa se lleve bien, entienda, la belleza del dolor.
Besos.